La gastronomía de Andorra es muy rica y variada, sobre todo en productos autóctonos de primera calidad. Con más de 425 restaurantes con influencias culinarias de Francia, España e internacionales, en el Principado podrás degustar tanto una cena en la cima de una montaña como una fondue de queso en el bar-restaurante de un iglú.
Si vienes de visita en viaje de negocios, podrás encontrar locales preparados para acoger grupos, con las dimensiones necesarias para cada empresa.
Andorra es un país montañoso, y es por ello que su cocina te acercará a los sabores y aromas propios de su geografía. Destacan los productos de temporada, que solo podrás degustar durante una época del año, como las verduras de invierno, los embutidos o las setas.
¿Una sugerencia? Acompaña tu menú con cerveza artesanal y no dejes de probar el Nectum, el jarabe de abeto, con ensaladas, carnes o helado de nata.
Si eres de las personas a quienes cuando viajan les gusta descubrir las tradiciones, en Andorra deberás visitar una borda convertida en restaurante.
Las bordas son antiguas casas tradicionales de alta montaña en las que antiguamente se guardaba el grano y el ganado. En la actualidad, algunas bordas han sido transformadas y acondicionadas, lo cual te permite contemplar una arquitectura y una decoración cálida y acogedora, a la vez que descubres la cocina tradicional.
Los encuentros culinarios mantienen viva la tradición en el país. Es por ello que una de las atracciones turísticas más importante son los eventos dedicados a la gastronomía. Entre ellos, destaca Andorra a Taula.
A este espacio, que se realiza en otoño, muchos lo conocen como el escaparate de la gastronomía de Andorra, ya que todos los chefs de los restaurantes de todo el país, guiados por la excelencia culinaria, la atención y el servicio al cliente, proponen recetas escogidas para la ocasión.